Churrito Papá, churrito Bebé y churrito Mamá….
Churrito Papá, churrito Bebé y churrito Mamá…. Así… siete veces.
¿Cómo se sentirá el churrito bebé en el centro?
Aparentemente nos puede dar una sensación de que el pequeño se siente seguro en medio de papá y mamá.
¿Y por qué lo recrea siete veces? ¿Y por qué necesita expresar esa posición siete veces?
¡Qué sensación esa de estar en el centro! … mirado, atendido, quizá demasiado con esos dos ojos que miran hacia la misma dirección pero que no se miran entre sí.
Sabemos que los niños expresan sus emociones a través del juego, de los materiales, de lo simbólico.
¡Que mejor forma de acompañarlos que intentar hacer una lectura lo más objetiva posible! Observar en silencio, y así poder hacer los movimientos precisos en el juego y en la vida.
Retomando la imagen…
¿Qué sucede con el papel de mamá y el papel de papá?… ¿Qué sucede con la pareja?
Y en una situación de crisis y al cuidado de un hijo y atendiendo un trabajo y....
Durante el confinamiento estamos desarrollando estrategias de supervivencia en la convivencia. Cada sistema familiar las suyas dependiendo del carácter de los individuos primero, de la pareja que conforman esos dos caracteres y del sistema familiar. Caracteres individuales con rasgos más narcisistas que tenderán a la individualidad, caracteres con rasgos más masoquistas que tenderán a la queja y a la demanda excesiva, caracteres con rasgos más compulsivos que se refugiarán en el trabajo y en la productividad.
Todo ello un baile perfecto a dos donde adornado con un hijx la cosa se complica un poquito más.
Y es que en ese juego de churritos… esos churritos dan la clave de lo que le está sucediendo… quizá papá y mamá ya no estén al lado… quizá la mirada que el sistema desarrolla para la supervivencia es la tendencia la individualidad de cada uno con un objetivo común (churrito bebe)
Esto se puede sostener tiempo… de hecho puede haber familias que se organicen de esta forma… pero quizá con tiempo estas parejas empiecen a sentir una insatisfacción, un “no sé qué” que esto no me hace sentir bien, un… no se que pasa que no siento deseo o una necesidad fuerte de huir hacia lo intelectual o lo productivo. Un... ya no somos un equipo!
Esta sensación de insatisfacción como cualquier otra emoción y sensación puede darnos la oportunidad de mirar más allá y reconocer y retomar y observar que les está sucediendo a esos churritos grandes y si esa posición es la que les hace sentirse bien.
Sin querer esa oportunidad que brinda la mirada al niño, a su juego y a su expresión puede hacer tomar conciencia de como se esta llevando este momento y como se activan dinámicas pasadas y como esas dinámicas y esas corazas hacen que cada uno se aleje en lugar de acercar colaborar y sentir.
De nuevo esas corazas individuales con esas tendencias caracteriales que se muestran no sólo a nivel individual sino a nivel familiar y como esos niños una vez mas nos dan la gran oportunidad de ver, de volver a ver… de Re-visar y de Re-tomar.